Emacs es un ambiente de trabajo más que un editor de textos.

Claro que este ambiente de trabajo viene con un editor de textos, pero es mucho más que un simple editor. De hecho, si fuéramos a evaluar Emacs sólo como un editor de textos, sarldría muy mal valorado, ya que es bastante pesado —y al principio— no es un editor muy cómodo.

Pero todo eso puede cambiar, ya que este ambiente de trabajo viene construído como un intérprete de una variaded de lisp, emacs-lisp, que lo hace casi completamente configurable y un excelente ambiente de trabajo.

De hecho, podemos crear un blog utilizando Emacs. Es más, he creado un ambiente de trabajo completo para mi (válgame la redundancia) trabajo (Emacs y la programación sólo son mis pasatiempos).

Desde aquí puede leer mi correo, conectarme a servidores y canales de IRC, leer mis entradas de RSS, leer y contestar mensajería (matrix, telegram, jabber), navegar en páginas web (en modo texto o en modo gráfico), abrir terminales para trabajar en páginas web (en modo texto o en modo gráfico), abrir terminales para trabajar en línea de comandos, administrar repositorios de git, escribir un diario privado (no un blog), interactuar con REPLs de distintos lenguajes de programación… Es increíble la cantidad de cosas que puedo hecer con Emacs y un poco de paciencia (para aprender a utilizarlo).